Cristina García Moreno “El ministro Wert miente. La barbarie taurina es contra toda humanidad”.

Ramón Pedregal Casanova

Escritor

Estamos con Cristina García Moreno, portavoz  de la Comisión de Defensa Animal de Los Verdes Comunidad de Madrid y presidenta de Galgos sin Fronteras. En 2008, fue número uno en la candidatura de Los Verdes Comunidad de Madrid al Congreso en 2008. Es. una mujer valiente, sensible y luchadora por toda causa justa, que dedica buena parte de su tiempo a la defensa de los animales. Sus palabras llaman a disponerse a hacer frente a tanta barbarie que recorre nuestro país, aunque en algunos sitios ya han superado la resistencia de las gentes más atrasadas, de la aristocracia y sus negociantes. En estos momentos de lo que llaman “corridas de toros” y cuando lo más reaccionario gobernante busca a nivel internacional su justificación, debemos recordar la siguiente “Declaración de la UNESCO en 1980: “La tauromaquia es el malhadado y venal arte de torturar y matar animales en público (…) Traumatiza a los niños y a los adultos sensibles. Agrava el estado de los neurópatas atraídos por esos espectáculos. Desnaturaliza la relación entre el hombre y el animal (…) Constituye un desafío a la moral, la educación, la ciencia y la cultura.” Cristina García Moreno añade: “La presencia de peñas taurinas en las candidaturas municipales de IU es incompatible con la ética verde”.

En el Congreso de los Diputados, y a propuesta del PP, ha empezado ya la tramitación para declarar  las corridas de toros Bien de Interés Cultural .¿Que opináis al respecto?

Finalmente lo que  pretenden  es declararlas  Patrimonio Cultural Inmaterial de España. Se trata de una estrategia más de este gobierno para blindar la barbarie taurina y que no vuelva a ocurrir como en Cataluña y Canarias, que las Comunidades Autónomas puedan abolirlas en sus territorios. Esta declaración implica más dinero público destinado a la tortura animal y el colmo del desatino es que pretenden abrir la vía  para que  la UNESCO las reconozca como Patrimonio Cultural Inmaterial a nivel Mundial, con todo el apoyo que eso supondría. Una vez más, el PP se alinea con uno de los sectores  más viles  y miserables  de nuestra sociedad.


El PSOE no ha sido mejor en los  años que ha  gobernado. Rubalcaba, consintió pasar los toros a Cultura cuando él era ministro del Interior del que dependía el asunto taurino, y ahora todas estas maniobras del PP se ven facilitadas por dicho cambio a Cultura. Tan sólo hago una pequeña  mención a la nefasta gestión de la Ministra Sinde en el Ministerio de Cultura en tiempos de Zapatero por su apoyo a la barbarie taurina y otros desatinos que definieron su vergonzosa gestión.

¿Cuál es la posición de Los Verdes de la Comunidad de Madrid?
Ante todo esto, la postura de Los Verdes Comunidad de Madrid  es de  oposición frontal, trabajamos y apoyamos a las distintas plataformas como La Tortura no es Cultura o  la Plataforma Social Ecos( en Facebook ) y el Partido Animalista PACMA www.pacma.es para evitar que todo este despropósito  prospere.

¿Qué papel juega la Monarquía en todo esto?
La Casa Real siempre se ha puesto a favor de envilecer España. Las corridas fueron de nuevo instauradas por ya en tiempos de Fernando VII, el llamado Rey Felón. El   Rey  actual, Juan Carlos I,  ha sido un calco  de su antepasado. Poco se puede esperar de un hombre que mata animales de forma casi compulsiva sin ningún remordimiento y es amigo intimo de ganaderos como Samuel Flores y otros como él. Debemos a ésta monarquía Borbónica  que España perdiera el tren de la Ilustración y a ellos debemos que se mantengan en el tiempo éstas prácticas medievales erradicadas en toda Europa. Goya fue un gran Ilustrado y, como tal, denunció en sus pinturas la barbarie taurina. Toda la obra de Goya, que murió exiliado en Francia, no son de apoyo a las corridas de toros, tal como nos quieren hacer creer.

En fechas muy recientes, y una vez más,  el segundo martes de septiembre  se ha vuelto a celebrar el llamado Toro de la Vega en la localidad de Tordesillas ¿ Cómo es posible que se siga celebrando este acto tan salvaje?.
Es lamentable que un año más un ser vivo sufra una muerte tan atroz cosido a lanzazos en una loca carrera por el campo huyendo de la muerte por una horda de salvajes a pie y a caballo, que  se apoye y fomente desde las instituciones y todo ello se financie de nuevo con dinero público. Es lamentable, además, que se ignore  el enorme rechazo social que genera  tanto en España como fuera de nuestras fronteras a nivel mundial,  que se archiven las decenas de denuncias interpuestas contra ésta atrocidad. Recientemente el PP ha rechazado también en el Congreso una proposición por parte de la Izquierda Plural para erradicar éste y otros festejos populares donde se tortura a miles de toros, vaquillas y becerros a manos de auténticos psicópatas. El PP está demostrando un grado de maldad muy preocupante al favorecer  la tortura animal.

Asimismo, se está hablando mucho de las becerradas populares como las de Algemesí, en Valencia, por su extrema crueldad, ¿qué opinas?
No todo son corridas de toros. Por desgracia, existen éste tipo de salvajadas más crueles si cabe, donde bebés de toro son banderilleados y estoqueados hasta catorce o quince veces por cualquier borracho, cobarde y miserable que lo desee. La vileza de estos espectáculos supera todo lo imaginable. Duele en el alma ver y escuchar los mugidos de dolor de estos pobres animales que, en realidad, llaman a sus madres desesperados mientras son masacrados entre risas y gritos de quienes no merecen llamarse seres humanos.

¿Cuáles son las acciones que se están desarrollando en contra de estos actos de barbarie?
Valoramos el trabajo hecho por PACMA durante los últimos años organizando concentraciones contra este festejo tanto en Tordesillas como en distintas ciudades. El pasado   día 14 de Septiembre más de 15.000 personas hemos recorrido las calles de Madrid llegando a las sedes del PP y PSOE en rechazo al Toro de la Vega. Ha sido un día histórico. Es muy importante destacar también que, recientemente, 140 científicos e intelectuales han hecho un manifiesto declarando lo perjudicial que es socialmente y para la infancia las corridas de toros o todo espectáculo que suponga la tortura a los animales. Esta declaración se puede ver www.latorturanoescultura.org

¿Qué opinión le merece  la vuelta a las retransmisiones de corridas de toros en TVE, la televisión pública?
Ya sabíamos que con el PP volveríamos a vivir una etapa de retroceso y  oscurantismo  en los medios de comunicación, y, cómo no, las corridas de toros serian un elemento más a añadir. Personajes como Pio García Escudero han influido para que los niños de España puedan ver en directo en la TV pública y en horario infantil cómo un ser vivo se convierte en un surtidor, mugiendo de dolor  y se ahoga en su propia sangre, atravesado por puyas banderillas y estoques. Y  el espectáculo es financiado con el dinero de todos.

En este sentido ¿Se tiene una idea del volumen real de fondos públicos que se invierten en España para apoyar las corridas de toros?
La cifra que se maneja desde hace tiempo de una forma aproximada es de 647 millones de euros, sin contar con los desvíos de las subvenciones de la UE. Sin dinero público no haría falta prohibir las corridas de toros; sin esa financiación desaparecerían. Sólo se mantienen por las subvenciones públicas en detrimento de otras necesidades sociales .

Sin embargo, no es eso precisamente lo que afirma el ministro de Cultura, el autor de la LOMCE contra la que se está pronunciando toda la comunidad educativa, señor Wert…
Recientemente, el Ministro Wert ha mentido descaradamente en los medios al afirmar que las corridas no se subvencionan y que producen enormes beneficios. Nos toman por tontos una vez más.

¿Existe alguna estimación sobre el porcentaje de españoles que muestran su rechazo a las corridas de toros?
Las últimas encuestas realizadas en relación a las personas que rechazan las corridas de toros son demoledoras: el 87 % rechaza en nuestro país éste bárbaro espectáculo. Y, además,  las nuevas generaciones elevan aun más este porcentaje. http://www.elmundo.es/blogs/elmundo/latrinchera/2012/02/14/los-toros-ya-no-molan.html

¿Es cierto que en la Unión Europea se están dando pasos para evitar que se desvíen fondos comunitarios a las Corridas Toros ?
En el Parlamento Europeo siempre ha habido quejas en este sentido y se han dado pasos para evitar que una parte de  los fondos destinados a la ganadería sean desviados a los toros que se utilizan en las corridas. No obstante, cientos de millones se desvían  de una forma u otra. Desde el Grupo Verde Europeo se han conseguido avances en este sentido si bien son insuficientes. En estos momentos el eurodiputado Alyn Smith lleva a acabo una campaña en tal sentido, que animamos a apoyar desde este enlace  http://www.alynsmith.eu/bullfighting.

Frente a estas posturas, ¿Quiénes apoyan las corridas de toros dentro de la Unión Europea?
Los taurinos saben poner en lugares estratégicos personas clave como el eurodiputado Luis de Grandes que lleva casi 25 años en Bruselas, siempre de nuúero dos en las listas del PP para frenar todas las iniciativas en contra y favorecer sus intereses. Es lamentable. Eso sí, cada año lo tiene más difícil pues millones  de personas de la UE son conscientes de que hay que abolir esta barbarie  y que se debe empezar por no financiarla con dinero público.

¿Cuál es la consideración que tienen las corridas de toros en América Latina?
Las corridas de toros fueron abolidas el siglo pasado en Argentina. En Chile fueron abolidas recientemente. Ecuador las ha eliminado en Quito, aunque sí se permiten en algunas plazas, pero el movimiento abolicionista es fuerte e imparable; Venezuela casi las ha erradicado,  y Colombia ha dado un paso de gigante al cerrar la Plaza de Toros de la Misericordia, la más importante del país;  hoy es un centro de ocio, cultura y recreo para el pueblo que  emociona verlo.

La vengüenza nacional

Fragmentos del libro “La Vergüenza Nacional”, de Luis Gil Pérez, donde se hace una muy clara y precisa exposición de lo que se vive en una corrida de toros, que ahora pretenden declarar Patrimonio Cultural Inmaterial de España.Juzguen ustedes mismos.
El Director General de algo, convertido por ley en cómplice del negocio, muestra un pañuelo blanco.
Un clarín tañe a muerte y el chirriar de los goznes del toril llama a silencio.
-¡Eh, toro¡
Una luz fuerte y amarilla deslumbra a Precito, cárdeno de cuatro años, 660 kilos de peso. Al mismo tiempo que avanza para escapar, siente un penetrante aguijonazo en el morrillo, y unas cintas amarillas, que se empiezan a teñir de rojo con los primeros hilillos de sangre, son engarfiadas en sus carnes.
Los engranajes de esta última fase de la Vergüenza Nacional comienzan a girar, y ya no pararán hasta que el toro bravo de augurante nombre, sea triturado, machacado y majado, en ese gigante almirez donde sangre y terror se aderezan con vísceras y crueldad.
Sale hosco, entumecido por el largo encierro….
Cuando alcanza el ruedo, una vocinglería recorre las gradas. El presagio del sanguinario rito rehumedece las salitrosas manchas de sudor, y el ácido olor se mezcla en los tendidos con el otro más acre de los habanos.
Los ojos de Precito … se fijan en el bailarín. En el centro del coso una extraña figura tocada con negras moñas y medias de seda rosa, llama su atención.
-¡Eh toro,eh¡.
El toro embiste y un capote gualda lo desvía, después de algunos capotazos otro pañuelo y el fúnebre redoble de tambor que acompaña al clarín abre de nuevo el toril para dejar paso a dos hombres con varas a caballo.
Guiado por capotazos, Precito queda ante un viejo rocín semiciego, por el lado del trapo que reglamentariamente tapa su ojo derecho para evitarle la espantosa visión de la embestida, no obstante patalea nervioso al aventar la muerte. Precito lanza sus 660 kilos contra el peto. La inevitable colisión se produce, unos sordos crujidos evidencian que muchas costillas no han resistido el impacto. El caballo cae y el toro siente ahora un terrible escozor producido por el puyazo. Diez centímetros de hierro encordado han hendido sus carnes, desgarrando fibras, rompiendo venas y dejando un boquete por el que se escapa la sangre a borbotones. Precito acomete al rocín abatido y entre sus patas encuentra sitio para cornear. El caballo quiere incorporarse. El moteado estambre se ha desgarrado y el cuerno de Precito se hunde en el vientre. Cuando un subalterno acude al quite, ya es tarde : Intestinos rebozados de albero asoman bajo la lona del peto, como colgados de ijadas. Pateado por un mozo, el jaco casi se incorpora, pero moribundo vuelve a caer .
Dos servidores extienden arena sobre la sangre vertida y con un gancho, recogen los despojos para retirarlos en una espuerta. Uno acerca al caballo, y sin prestar atención a sus desorbitados ojos, acaba con los estertores seccionándole la médula con un estilete..
Bajo la tela de arpillera sujeta con plomos, fuera ya de las miradas de sudorosos y congestionados rostros, descansa por fin el viejo jamelgo otrora brioso corcel que prestó su nobleza y fuerza al mejor servicio del “hombre”..
Precito asiste de lejos, aterrado, buscando la salida, a las dantescas escenas.
-!Eh Toro!.
Otros capotazos le conducen de nuevo al castigo. Su nublada visión acaba de descubrir la fantasmal aparición de la pared enguatada que creía derribada, otro caballo le espera.
-Manue, pícale bien que no me levante la cabeza. -Ordena el diestro.
El toro acomete con fuerza, pero esta vez el peto no cae. En su morrillo se clava otra pica. El hierro escarba, gira, profundiza y destroza. La cruceta, usada como palanca y pala de hélice, abre un tremendo agujero .intenta retroceder ,pero el peto el tapa la salida. Noventa kilos de picador se mantienen volcados al extremo de la lanza. Tendones y ligamentos son cortados y machacados, y Precito, chorreando sangre y reculando, logra separarse del paredón de ajusticiamiento.
Una arteria tajada lanza un palpitante surtidor de sangre. El público cercano se levanta de sus asientos para tasar el daño y aforar la hemorragia. La excitación hace presa en el tendido algunos sienten sórdidos temblores .
-!Eh toro !.
Precito no atiende. Busca una encina donde rascar el lomo, unas jaras para espantar las moscas que ya escarban en los cuajos de sangre, tiene sed y busca el camino para bajar al arroyo .
-!Borrego ! !Mansurrón! -Gritan los del tendido del siete .
-Son como borregos con cuernos. Les pinchas con un alfiler y ya se duelen -Comenta el columnista de moda.
!Al corral con la burra!-Dicen otros mirando al palco.
-!Eh toro!
Otro bailarín de puntillas con las manos en alto y perifollos, llama su atención. Unos saltos, desplantes chulescos y cimbreos, exaltan de nuevo los sentidos del respetable. Precito se arranca y refulgentes destellos metálicos, salidos de las manos del banderillero, detienen su embestida. Dos arpones enhebran acero en la carne tumefacta provocandole insoportable dolor. A cada paso o movimiento los palos se desplazan y sus puntas de hierro rabanan carne y tejidos. Los coágulos de las picas toman vida y se escurren por las atarjetas del costillar para dejar paso a nuevos borbotones pulsantes.
El siguiente bailarín no le da opción. Su quiebro es abortado en el aire por el asta derecha, y el cuerpo del banderillero ensartado por la ingle inicia ahora una danza espasmódica como si fuera una marioneta. Un último derrote lanza al subalterno a tierra, mientras capotes rojos tapan la cara del toro. La muerte del toro así quedará justificada para los conciencias que lo necesiten.
El cuerpo es elevado sobre las tablas dejando un reguero de sangre, recorre el callejón al que se asoman los privilegiados de barrera. El diputado entendido en femorales, cambia impresiones con su vecino el banquero sentados sobre la almohadilla alquilada a la Cruz Roja. Un hombre yace ahora en la enfermería.
En la Plaza, Precito ha recibido otros dos pares de banderillas. Una de ellas, es demasiado trasera, rasguña en hueso y produce un sonido de ris ras. Seis son ya los rehiletes que hurgan profundo antes de que el presidente saque de nuevo el pañuelo.
El toro está sólo en la arena, bufando de dolor mientras toma aliento. Nunca se había sentido tan cansado, ni siquiera cuando trotaba monte arriba para ventear sobre la colina al tufo de las vacas en el cerrado. Rastrea con la mirada el lugar por donde entró; busca la salida que le lleva al monte.
Le gustaría encontrar al mayoral, que le mimaba con manojos de hierba fresca mientras le rascaba el lomo.
-!Eh Toro!
El bailarín de grana y oro se acerca lentamente con movimientos de pasarela y le cita. Precito se arranca con desgana, sintiendo como los anzuelos le cortan la carne, y los remos le fallan hasta hacerle caer..
Precito renquea con los cuartos traseros como paralíticos que la segunda puya le ha machacado una vértebra. Tres o cuatro capotazos cortos, y el figurín cambia en la barrera el estoque de madera por el de acero curvado.
Se acerca a Precito y le enseña la punta de la muleta para que junte los remos. Observa como se abren los omóplatos dejando hueco para hundir la espada.
En coso se hace el silencio, silencio de muerte, de cadalso .
Se lleva el puño a la cara, los ojos fijos entre la punta del estoque y la nuca del animal; avanza la muleta para tapar su salida y se echa hacia adelante al tiempo que gira el cuerpo.
El toro embiste al trapo y esta vez siente un hierro que le corta la pleura. ¡Mala suerte media estocada!. La carne despide el acero que que hiere, sólo para recibir al momento otro pinchazo que astilla el omóplato, y otro más que pincha el pulmón. ¡Mala suerte! El toro escupe sangre de su bofe inundado. El bailarín desencajado, entre insultos, va por el estoque de descabellar.
Precito no agacha la cabeza, no ofrece al sacrificio la cerviz y el espada rabioso -¡Maldito toro no colabora! -le pincha el morro para humillar. La sangre encuentra estos nuevos salideros y ya todo el hocico brota espeso, ahogado. El estilete por fin, abre hueco entre dos vertebras y con la médula casi seccionada. Precito vivo cae de rodillas, sin agachar la cabeza que aun quiere encontrar el lugar por donde entró.
El puntillero se acerca por detrás y con movimientos de vaivén corta el último cordón. La cabeza dislocada se apoya en el albero. El toro ya no siente, sólo la angustia de no poder respirar.
De los tendidos salen pitos y palmas y algún piropo.
La duquesa agita el abanico, su invitado se afloja el alzacuello y la diputada desdeña a la chusma que se pronuncia soez.
Precito se muere. Sus ojos turbios y salpicados de tierra se llevan, libres, el azul del cielo.
El Presidente saca el pañuelo blanco y todo vuelve a empezar. Treinta mil veces en solo un año.

Fuente:
http://www.cronicapopular.es/2013/10/cristina-garcia-moreno-el-ministro-wert-miente-la-barbarie-taurina-es-contra-toda-humanidad/