113 organizaciones y coaliciones de la sociedad civil, entre ellas muchas españolas, han expresado en una carta abierta
su preocupación sobre los impactos ambientales, sociales y económicos
de la entrada al mercado europeo de agrocombustibles (también llamados
biocombustibles). Esta carta llega en uno de los momentos más
importantes de la revisión de las políticas europeas en la materia: la
votación en los diferentes Comités del Parlamento Europeo sobre la
Propuesta de la Comisión para una nueva legislación.
Las organizaciones firmantes, que representan a millones de ciudadanos,
instan a los responsables políticos europeos a revertir la expansión de
los agrocombustibles
procedentes de cultivos, por no presentar ventajas o muy pocas para el
clima y en cambio provocar graves impactos ambientales y sociales:
- Está muy documentado que, al desplazar otros cultivos, los agrocombustibles provocan directa e indirectamente la destrucción de ecosistemas vitales para el almacenamiento de carbono, como bosques y humedales. Así, dichos carburantes provocan una cantidad de gases de efecto invernadero parecida o incluso mayor que los combustibles fósiles, tornando a ridículas esas políticas que supuestamente luchan contra el cambio climático.
- La competencia por la tierra que generan contribuye al aumento y la volatilidad de los precios de los alimentos, exacerbando la pobreza y el hambre de las poblaciones más vulnerables del mundo.
- Está muy documentado que, al desplazar otros cultivos, los agrocombustibles provocan directa e indirectamente la destrucción de ecosistemas vitales para el almacenamiento de carbono, como bosques y humedales. Así, dichos carburantes provocan una cantidad de gases de efecto invernadero parecida o incluso mayor que los combustibles fósiles, tornando a ridículas esas políticas que supuestamente luchan contra el cambio climático.
- La competencia por la tierra que generan contribuye al aumento y la volatilidad de los precios de los alimentos, exacerbando la pobreza y el hambre de las poblaciones más vulnerables del mundo.